Todo llega a su fin. (Versión Montiel)

Desde que fuí adolescente mi peor miedo fue el final de todas las experiencias, etapas, fases, o amistades. En mi niñez, jamás noté este miedo.

Hace una semana me enteré que mi primera experiencia laboral había terminado, y que de nuevo estaría en el limbo del desempleo. Me aterro mucho al principio la noticia ¿qué voy a hacer? ¿a dónde envió mi curriculum? y a la vez enfrentar los pensamientos de estar bajo el encierro total por la pandemia. Al siguiente día yo misma me puse a pensar que en la vida laboral, es normal terminar proyectos, trabajos, y que lo que me estaba pasando era totalmente normal, y no tenía porque alterarme.

Mis hábitos se hacen mi lugar seguro, si hay un cambio o algo nuevo, me toma algo de tiempo acostumbrarme y a entender que los cambios son normales.

Mi miedo sigue existiendo, y me aterra saber la línea de tiempo de algunos amigos en mi vida, personas, compañeros, experiencias, y cambios que no sé que sucederán. La vida es impredecible, y es lo que más temo por muchas cosas.

El problema que tengo, es que a veces tengo tanto miedo de saber en qué momento va a terminar algo que acabó arruinando el presente, o ya no tengo esa ilusión de conocer a alguien porque solo pienso en el tiempo.

Este blog es una carta de odio al tiempo y a mi gran temor que es el que se terminen las cosas, experiencias, relaciones etc.

Extra Cookies

- Si te pones a pensar, cuando uno está viviendo la infancia, no tienes ninguna expectativa de lo que ocurrirá, o qué pasará después, nada más vives el día a día.

- En lo personal, mi mente y mi ansiedad están controladas por el orden. Todo debe tener un dogma y pasos para tener la perfección y tranquilidad en lo que hago, desde tener pequeñas rutinas, hasta exigirme seguir ciertos pasos para estudiar, trabajar o conocer a alguien

- Yo misma me puse a pensar porque no me había incomodado el cambio del trabajo como otras cosas, y fue cuando entendí que yo misma al saber que una experiencia laboral debe terminar y que es parte de las reglas de un empleo, mi cerebro lo tomó con mucha tolerancia.

- Cuando era niña, justificaba este tipo de cambios a la Biblia. Eclesiastés es mi libro favorito de la Biblia, habla sobre el tiempo, y como el tiempo y los actos de los hombres termina siendo vanidad.